LA ENTREVISTA DE VITORIA 1476

AGOSTO DE 1476
Desde Vitoria á Guernica
ha partido el rey Fernando,
á jurar las viejas leyes
al pié de aquel roble santo.
Allí, porque contra ley
de esta tierra, entró el prelado
de Pamplona, sin tardanza
de Bizcaya le expulsaron,
y hasta el polvo que pisó
fué recogido y quemado,
y lanzadas sus cenizas
al furor del Océano.
Con el rey, venga rencillas
de ayer, el conde de Haro,
que á la sombra del monarca
bien puede mandar ogaño.
A Vitoria vuelve el rey,
sabiendo que á visitarlo
viene su padre Don Juan,
de Aragón el rey anciano.
Desde Vitoria en su busca
sale, de Elorriaga al campo,
y en vano, al verle, pretende
cual hijo, besar su mano,
ni cabalgar á su izquierda
ni en su posada dejarlo,
cuando llegan á Vitoria,
su gran respeto mostrando,
que el viejo rey de Aragón,
no quiere que el soberano
de Castilla, su señor
aquí en sus propios estados,
cual humilde hijo se porte,
sino como rey preclaro.
Don Juan de Aragón no oculta
su gozo inmenso, esclamando,
al mirar á su hijo rey
de un pueblo del que fué echado:
"¡ No permitaís desde el cielo,
santos bien aventurados,
que este dia tan alegre
se torne en oscuro y malo;
que sí la prosperidad
cuando es mayor dá gran cambio,
si yo pequé, y castigarme
quereis,  sea yo el penado,
y no mis queridos hijos
ni mis amantes vasallos!"
Veinte dias en Vitoria
entre regocijos varios,
pasan los reyes poniendo
su afan en negocios árduos,
que á Nabarra y á  Aragón
y á Sicilia dedicaron.
La corona aragonesa
ceder a su hijo Fernando
quiere, más no está Castilla
en calma para lograrlo;
y el hijo al padre aconseja,
que deje al tiempo el encargo
de tal sucesión precisa,
llamada á enlazar al cabo,
en uno, los dos poderes
que rijen al suelo hispano.
Sacado del libro Romancero Alabés de Ricardo Becerro de Bengoa, Cronista Honorario de Vitoria, Vitoria, Establecimiento Tipográfico de la Viuda e hijos de Iturbe. San Francisco 23 y Arquillos 8. 1885
Yo tengo la edición facsimil del 2006 de Editorial MAXTOR